Unas zapatillas deportivas con tacón es la última creación, no exenta de polémica, de la firma Balenciaga en colaboración con Crocs, marca artífice de la mítica sandalia de goma multicolor que tanto dio que hablar en su momento pero ante la comodidad de llevarla arrasó en ventas.
Ahora, siguiendo esta misma estética, el actual director creativo de la centenaria casa de moda, Demna Gvasalia, ha ido un poco más lejos en su conocido afán de provocar uniendo en un solo calzado los dos antiestéticos pero conocidos ‘uggly shoes’ y las zapatillas ‘Triple S’. La enseña ha presentado esta semana en el desfile de Balenciaga Primavera Verano 2022 los ‘Stilettos’ Crocs, que está generando sentimientos encontrados en las redes, divididas entre la genialidad del creador o la estupefacción de los que piensan que es un horror de calzado.
Su lanzamiento al mercado será el próximo año, pero teniendo en cuenta lo que costaban las anteriores Crocs que versionó Balenciaga, las que se alzaban sobre una plataforma de más de 10 centímetros, se estima que su precio no baje de los 800 euros. (El precio habitual de unas Crocs básicas es de 35 euros).
Esta nueva colección se llama ‘Clones’, y no solo incluye el zueco con el tacón de aguja-de-plástico, también hay unas botas de goma, las Crocs-lluvia, que recogen la esencia de ambas firmas. Estarán disponibles en verde, gris y negro.
