El diseñador de moda francés Pierre Cardin, estilista visionario y pionero del prêt-à-porter, falleció el pasado 29 de diciembre a los 98 años. Su familia ha informado de su muerte, según ha recogido el medio AFP.
Cardin nació en 1922 en San Biagio di Callalta (Italia) aunque fue en Francia donde hizo carrera y consiguió revolucionar el mundo de la moda por su creatividad y su espíritu emprendedor.
Los inicios de Cardin en la moda se remontan a 1945, cuando decidió mudarse a la capital de la moda por excelencia, París. Su historia de amor con la moda francesa empezó dos años más tarde, al convertirse en el responsable del atelier de Christian Dior.
Tras varios años de éxito en la maison francesa, el modista de origen italiano llamó a la puerta de Balenciaga, pero le rechazó. Ese varapalo le dio el impulsó que necesitaba para comenzar un proyecto propio, una marca que le otorgaría fama mundial y el título de visionario.
Bajo su propio sello, Cardin revolucionó la alta costura con modernas combinaciones e incluso se le otorgan los primeros pasos de la moda unisex, ya en los años 50. Un estilo de vanguardia, a veces futurista, que tanto le valió la entrada como la salida de la Chambre Syndical de la Haute Couture, la Cámara de la Alta Costura en París.
Cardin puede considerarse como uno de los impulsores de la moda como motor de globalización, al llevar por primera vez a finales de la década de los años 50 la alta costura francesa a Japón.
Su salida de la Cámara de la Alta Costura guarda relación con uno de sus mayores logros en la industria, la creación del prêt-à-porter. Cardin buscó en sus diseños más experimentales -que vendió en los grandes almacenes Printemps- crear prendas cómodas, más baratas y de rápida producción para poder llevar al momento en las calles. Hoy la mayoría de diseñadores disponen de una línea dedicada únicamente a este tipo de diseños.
