Mujeres sensuales, coquetas y femeninas. Diosas del verano que envuelven su piel de color y elegancia para zambullirse en un océano de fantasía transformado en objeto de deseo. Así es la esencia de Emme Swimwear, una firma tinerfeña especializada en moda baño que comienza a abrir camino entre la arena de las playas del mundo.
María Matamoros y Melissa García son el alma de Emme Swimwear, dos amigas de la infancia que hace poco más de un año decidieron dar el paso y hacer de un sueño una realidad, naciendo así una marca que une entre sus respectivas iniciales un universo de seducción. «Llevábamos tiempo macerando este proyecto, porque hasta entonces lo que hacíamos era diseñar nuestros bañadores, pero sin venderlos. A nuestas amigas les gustaban mucho y, en parte, fueron las que nos animaron a dar el paso. La moda nos ha fascinado desde siempre y lo que hasta ahora había sido un hobby se ha convertido en nuestra pasión», explican las diseñadoras de esta joven firma que, además, está adscrita al programa Emprendemoda Tenerife.
Melissa García y María Matamoros son el alma de Emme, una joven firma tinerfeña especializada en moda baño
Aseguran que no han estudiado diseño ni patronaje y, aunque Melissa es audioprotesista, en cambio María ha estado vinculada a la moda previamente, por lo que el conocimiento del sector les ha sirvido de base para dar el paso y lanzar al mercado la enseña conjunta con una primera colección bajo el nombre ‘Femme’. Una propuesta versátil y colorista, integrada por seis modelos de bañadores y siete de bikinis, cada uno en siete colores diferentes, ideada para todo tipo de mujer. «Ahora hemos sacado una segunda colección que se llama ‘Ultra Femme’ la cual, en parte, es una continuidad de la primera. No obstante, estamos trabajando en la próxima en la que sí habrá un gran cambio», anuncian.
La marca presenta su colección primavera-verano 2016, que llega bajo el seductor nombre de ‘UltraFemme’
Nuevo estilo que, por contra, no implicará perder la identidad de una firma que se caracteriza por no utilizar estampados sino colores lisos en cada diseño, la combinación de tules y la apuesta por las siluetas asimétricas. Al respecto, María y Melissa comentan que «queremos dar impulso a la marca y, aunque seguiremos centradas en baño, el próximo reto será contar con una línea masculina y otra beachwear, como shorts y camisetas a juego con los bañadores. No obstante, el objetivo más inmediato de Emme va a ser el de contar con el primer punto de venta físico en Santa Cruz», destacan las creadoras.
La apertura de una tienda en Santa Cruz y nuevas líneas de hombre y beachwear serán los próximos retos
En este sentido, indican que «la venta en Canarias se realiza, de momento, a través de nuestra tienda online, aparte de en varios espacios multimarca que ya comercializan los productos en Barcelona e Ibiza. Pero, aunque la web funciona bien y los bañadores han llegado hasta Noruega o Australia, la propia demanda nos ha llevado a dar el paso de contar en breve con un espacio propio».
Emme Swimwear se encuentra inmersa en la promoción de sus prendas con la celebración de ‘The Event’
Diseños exclusivos y únicos destinados a vestir los días de sol y que se fabrican en Tenerife para viajar por todo el mundo. Innovación entre lycras que busca readaptar las tendencias de la moda al cuerpo de la mujer más sensual. «En baño casi todo está creado y por ello nuestro objetivo siempre es marcar una diferencia, alejándonos de la tradicional bandana, el triángulo o el aro. Buscamos la originalidad en cada prenda y este año lo hemos logrado al ser la primera firma de las Islas que ha lanzado al mercado prendas reversibles. Además, hemos incorporado el foam en varios modelos y apostamos por la doble lycra en vez del forro, logrando que no se transparente el bañador o que se filtre la arena», puntualizan.
Blanco, negro, plomo, caqui y sandía centran la paleta de color de la colección para esta temporada estival
Prendas de baño que se ciñen al cuerpo como una segunda piel y que además también sirven como body para la noche por su elegancia y por los colores que la integran. Una paleta cromática que en la colección actual está compuesta por tonos blanco, negro, plomo, caqui y sandía y que llega al mercado con precios que oscilan entre los 45 y 70 euros. «Para la calidad y exclusividad que garantizamos, ya que no se realiza una producción en exceso, no es caro. Pero, por otra parte, siempre hacemos promociones puntuales o showrooms de venta privada como los que estamos llevando a cabo por toda la Isla bajo el nombre de ‘The Event'», subrayan las diseñadoras.
María Matamoros y Melissa García sonríen cuando se les pregunta por todo lo que han logrado en tan poco tiempo con su firma conjunta. Ambas están satisfechas por el éxito que han comenzado a cosechar, aunque son conscientes de que hay que trabajar mucho y, sobre todo, apostar por exteriorizar la comercialización. «Creemos en lo que hacemos y, sobre todo, en que nuestro producto puede tener cabida en nuevos mercados. Por ello, el siguiente objetivo a largo plazo será ira a ferias y abrir la marca a la internacionalización», concluyen.