Feminidad en clave sport y guiños lenceros visten a la nueva mujer de Prada, firma italiana que, tras cinco años de ausencia, regresa al mundo de la moda con su colección Crucero 2018.
La Galleria Vittorio Emanuele II de Milán fue el escenario elegido por Miuccia Prada para presentar la nueva propuesta, en la que predominan los colores pastel, las transparencias, los brillos y las lentejuelas fusionadas con tules en faldas y líneas deportivas y futuristas.
También los pijamas de seda o las plumas, así como los calcetines largos, han acompañado una colección juvenil, en la que la diseñadora italiana apuesta por una mujer cómoda, atrevida y versátil.