Negro y blanco para una de las alfombras rojas más esperadas del año. Los Oscar, los premios más importantes del cine cubrieron la madrugada del lunes (España) el Dolby Theatre de Los Ángeles, donde se reunieron las estrellas de Hollywood para asistir a una gala en la que la película Parásitos se alzó como la gran triunfadora.
No obstante, galardones aparte, la red carpet de los Oscar volvió a congregar toda la atención de la velada cinematográfica por la que desfilaron todos los invitados. Una pasarela de moda que, en esta edición, no fue tan vistosa como en ediciones anteriores y en la que las prendas recicladas se convirtieron en las grandes protagonistas.
Entre los vestidos más destacados brilló el de Janelle Monáe, un diseño en plata de Ralph Laurent. También sorprendió Natalie Portman, con un vestido negro y dorado con transparencias de Valentino y una capa con los nombres bordados de todas las mujeres directoras no nominadas a los Oscar. Por su parte, Penélope Cruz recuperó un look de Chanel de la primavera-verano 1995. Un vestido negro que destacó por su escote ‘halter’.
